Saltar al contenido

La SEGUNDA ENTREVISTA: 5 Razones por las que no te están llamando

2 julio 2020

La búsqueda de empleo está llena de frustraciones, pero tal vez ninguna sea más molesta que quedarse estancado en el mismo punto del proceso de la entrevista. Ya sea que tengas problemas para llamar la atención del gerente de contratación en primer lugar o dificultades para cerrar el trato y obtener la oferta, es difícil no alcanzar tu objetivo. Puede ser aún más desafiante cuando no te seleccionan para una segunda entrevista, aunque creíste hacerlo bien la primera vez.

Si estás abierto a la autorreflexión, es posible que puedas darte cuenta de lo que estás haciendo mal e intentar algo más.

Razones FUERA DE TU CONTROL por las que no te Llaman a una SEGUNDA ENTREVISTA

Pero, antes de considerar tus posibles pasos en falso, es importante tener en cuenta que hay muchas razones por las que es posible que no te estén considerando para una segunda entrevista que no tengan nada que ver contigo. 

Si recién estás comenzando un proceso de búsqueda de empleo y has tenido una o dos primeras entrevistas que no condujeron a un seguimiento, no asumas que el problema es tuyo.

El Gerente de Contratación Podría Tener Secretamente a OTRA PERSONA EN MENTE

Esto puede parecer cruel, pero ahí va: los gerentes de contratación pueden ya tener a alguien en mente para contratar (por supuesto, de la misma compañía), pero, aun así, tienen la orden de explorar otras opciones y entrevistar a candidatos externos

En ese caso, podrías ser el solicitante más calificado del mundo, sin embargo, es casi seguro que no lleves chance; probablemente no te llamarán para una segunda entrevista.

Las NECESIDADES del Empleador Podrían Haber Cambiado

Las empresas hacen cambios todo el tiempo: cortaron sus presupuestos, reasignan dinero a diferentes roles, mueven posiciones a otros equipos y equipos a otros lugares. A veces, estos cambios ocurren en el medio de tu proceso de entrevista.

Por lo general, en este caso, el gerente de contratación o el representante de recursos humanos te informará disculpándose de que sus necesidades han cambiado. Si bien eso puede sonar como, “No eres tú, soy yo”, a veces es la verdad. No puedes conseguir un trabajo que ya no existe.

Tal Vez no ENCAJABAS EN LA CULTURA de la Empresa

El ajuste cultural importa casi tanto como el conjunto de habilidades cuando se trata de contratar. El trabajador más talentoso del mundo no será tan productivo en un ambiente en el que no encaje y no se sienta cómodo.

El ajuste cultural podría ser una buena razón por la que no te llamen para una segunda entrevista. Piénsalo, si eres una persona amable y te encanta trabajar en equipo, de cerca y en persona, trabajar de forma remota no será una buena experiencia para ti. 

Si eres un introvertido que prefiere trabajar solo, una gigantesca oficina abierta llena de beneficios y fiestas se sentirá como haber instalado una tienda en medio de la estación Grand Central.

No tiene nada de malo si el gerente de contratación adivina que no vas a ser feliz trabajando allí. Es posible que te hayan hecho un gran favor al dejarte pasar a un lugar donde te sentirías más cómodo y exitoso. Por esta razón podrían no haberte llamado para una segunda entrevista.

Razones que PUEDES CONTROLAR por las que no te Llaman a una SEGUNDA ENTREVISTA

Ahora sí, no siempre las razones por las que no te llaman dependen de factores ajenos a ti. En ocasiones, han sido tus mismas acciones las que te han jugado en contra, derrumbando tus posibilidades de tener una segunda entrevista.

Pero, ¡que no cunda el pánico! Estas son buenas noticias, porque significa que, si el daño depende de lo que tu hayas hecho, entonces puedes corregirlo y aquí te voy a enseñar qué errores cometiste y cómo puedes arreglarlos.

No Contaste la HISTORIA CORRECTA

Antes de poner un pie en la sede corporativa, debes preparar tu discurso y respuestas, así como algunas historias cortas y atractivas sobre cómo tus habilidades y calificaciones coinciden con sus requerimientos.

Ahora bien, no se trata de un monólogo acerca de la historia de tu vida ni nada por el estilo. Es más simple que eso; significa que debes estar listo para compartir tus logros de una manera que resuene con el equipo de contratación. Básicamente, cuentas historias que reflejen tus logros profesionales y que sean relevantes para la posición. No hace falta hablar de cuando te caíste de la cama teniendo 6 años.

¡Las personas aman las historias! Si puedes contar una buena historia, tendrás una ventaja sobre la competencia y quizás logres abrirte paso para tu segunda entrevista.

Cuando estés elaborando tus historias, enfócate en lo que sea relevante para la posición. Por ejemplo, es posible que seas un líder extraordinario, pero si no están buscando gerentes o supervisores, una historia sobre esas habilidades está completamente fuera de lugar.

Arruinaste la PRIMERA ENTREVISTA 

No sabías mucho sobre la compañía, y se notaba. No podías explicar por qué querías el trabajo ni proporcionar respuestas a otras preguntas estándar de la entrevista. Llegaste tarde o de otra manera fuiste grosero.

Hay muchas maneras de echar a perder una entrevista, y aunque podrías compensar algunas de ellas en tu seguimiento, a veces simplemente no hay recuperación posible; por lo que no habrá una segunda entrevista. Cuando eso suceda, aprende de tus errores y mejora la próxima vez. Y no te castigues, todos hemos arruinado alguna entrevista.

No Seguiste las INSTRUCCIONES

En todos los puntos durante el proceso de la entrevista, es importante seguir las instrucciones. Envía los materiales solicitados y emplea los formatos de archivo especificados. 

Una vez que tu entrevista haya finalizado, asegúrate de seguir los pasos del gerente de contratación al momento de hacer el seguimiento. Por ejemplo, si dicen que estarán entrevistando a candidatos durante las próximas dos semanas, envía una nota de agradecimiento de inmediato, pero espera para realizar un seguimiento adicional hasta después de que tu proceso se haya completado.

Recuerda que esto es una competencia; ellos estarán muy ocupados entrevistando a muchos otros postulantes y tramitando requisitos. Si les gustaste y te considerarán para una segunda entrevista, te llamarán; si no les interesa tener una segunda entrevista contigo, ni por toda tu insistencia lograrás que te reconsideren. Dales tiempo para llamarte.

Lo importante aquí es no ser demasiado insistente, al punto de resultar pesado, fastidioso o desesperado. Demuestra que te interesa la posición, pero ese interés no debe traducirse en insistencia y acoso, porque pensarán que no tienes confianza en ti mismo ni sabes aceptar un eventual “no” como respuesta, cualidades que te cerrarán las puertas a una segunda entrevista.

Fuiste DEMASIADO Persistente.

Hacer un seguimiento después de una entrevista de trabajo es complicado. Este punto, de hecho, se vincula muchísimo con el anterior.

Está bien si expresas tu agradecimiento por la oportunidad de la entrevista y tu interés en el puesto, pero no des la impresión de estar acosando al departamento o al entrevistador, pues te hará lucir como alguien muy desesperado a quien se le cerrarán las puertas para una segunda entrevista. 

Si has enviado una nota de agradecimiento y un correo electrónico de seguimiento, y no has recibido respuesta, puede ser mejor dejarlo ir. Nadie quiere trabajar con alguien que nunca deja pasar nada.

Una de tus Referencias NO ESTÁ DE TU LADO 

¿Sabes lo que dicen tus referencias sobre ti? Si no, es hora de averiguarlo.

Primero, asegúrate de pedir referencias de personas que estén familiarizadas con tu trabajo y que definitivamente tengan cosas favorables que decir sobre ti. Siempre solicita referencias potenciales si están dispuestos y pueden dar fe de tus buenas cualidades antes de transmitir su información y echa una mirada a los detalles del trabajo con ellos para que sepan lo que el gerente de contratación quiere escuchar.

Si todavía no estás seguro de qué tipo de imagen están pintando tus referencias para posibles empleadores, siempre puedes intentar preguntar a los gerentes de contratación por qué están pasando de tu candidatura. 

Mantenlo vago y respetuoso: no exijas una explicación detallada y no seas directo. Pero no dudes en preguntar si tenían alguna razón particular para pasar de ti. Enmárcalo como una solicitud de comentarios. Luego, agradéceles su tiempo independientemente y sigue adelante.

error: Este Contenido está protegido y tiene CopyRight